Historia del Japón - Primera parte-

Como que no hemos estado muy movidos esta semana ¿verdad?.

Pero ¡diay! ¿que quieren que les diga?, Noviembre es el mes de los finales en la U, Así que salvo que ustedes quieran hacer nuestros trabajos (que no creo) no queda de otra, más que esperar.

Por suerte el Tío-Sendo es un estudiante aplicado (¡JA!) y tiene un ratito libre, para escribir en el Blog XD.

Ahora bien, dejándonos un poco de chorradas; para esta ocasión quisiera compartir con ustedes un pequeño, pero significativo resumen,de la Historia de uno de los países que más admiro: Japón...


Este Resumen me lo encontre rodando dentro de los tantos archivos de texto que hay en mi Computadora; así que no se con exactitud de donde lo saque. Nos osbtante igual aquí se los dejo para que ustedes también aprendan un poquito de l devenir histórico de esta fascinante cultura.

Breve Historia del Pueblo Japonés

El pueblo japonés es sumamente consciente de su pasado histórico. Como materia curricular la historia goza de gran importancia, tanto en las escuelas como en la universidad. No es extraño ver en la portada de los periódicos noticias relacionadas con hallazgos arqueológicos u otro tipo de acontecimientos de relevancia histórica, y en televisión es frecuente la emisión de documentales que se ocupan del pasado.

Los japoneses valoran los contactos con las culturas china y coreana como formadoras de su cultura, y las relaciones con Occidente, durante el siglo cristiano y a partir del siglo XIX, como igualmente determinantes en su andadura como nación. Son conscientes de los daños ocasionados por Japón durante sus agresiones imperialistas en Corea, China y Manchuria, y de su responsabilidad en la Segunda Guerra Mundial. El pasado de Japón es dividido por los propios japoneses en siete grandes etapas o edades: prehistórica o senshi, protohistórica o genshi, antigua o kodai, medieval o chûsei, premoderna o kinsei, moderna o kindai, y contemporánea o gendai. Cada una de ellas suele subdividirse en unidades de periodicidad más específicas.

Edad prehistórica o Senshi

Los primeros datos conseguidos sobre la población del archipiélago japonés datan de hace 30.000 años, aunque es probable que las islas estuvieran habitadas previamente.

Dado que no existen documentos escritos anteriores al siglo VIII, todo estudio con anterioridad a estos ha de basarse en restos arqueológicos y fuentes documentales chinas o coreanas que hagan referencia a Japón.Los arqueólogos dividen la prehistoria en cuatro grandes períodos: una etapa paleolítica y precerámica anterior al 10.000 a.C.; el período Jômon (ca.10.000-ca. 300 a.C.) durante el cual se introdujo la fabricación de la cerámica; el período Yayoi (ca.300 a.C.-300 d.C.) en el que la utilización del metal y la agricultura de carácter sedentario se generalizaron; y el período Kofun (ca.300-710), edad de las grandes tumbas, que evidencian los inicios de la centralización del poder político. Este último período de transición a la era histórica, en la que se incorpora la escritura, es también encuadrado en el período protohistórico.

Edad protohistorica o Genshi

Antes de finalizar el período Yayoi, desde alrededor de mediados del siglo III, los clanes en la región de Yamato y en otras áreas del centro y oeste de Japón comenzaron a levantar montículos funerarios donde enterrar a sus jefes. Las de mayor dimensión se elevaron en Yamato, zona de mayor preeminencia que controlaba políticamente el resto del país. El periodo Asuka (593-710) marca la fase final de esta transición entre el período protohistórico y su entrada en la historia. Este período arranca del establecimiento de la emperatriz Suiko en su palacio de Toyoura en la región de Asuka en Yamato, al sur de la actual Nara.

Ese mismo año, 593, el príncipe Shôtoku se convirtió en su regente. El budismo, introducido a mediados del siglo VI encontró en él y en su corte el mayor apoyo que pudo imaginar.Tanto en arquitectura y urbanismo, como en política, se siguieron los modelos chinos y coreanos y, tomando prestada su escritura, se comenzaron a recoger los primeros anales históricos.

Desde el siglo VIII Japón era el segundo país de Asia Oriental, sólo inferior a China, en sus realizaciones políticas y culturales. Los japoneses asimilaron muchos elementos de la civilización china. Sin embargo, en casi todos los campos marcaron con su propia impronta lo que habían aprendido, de modo que mantuvieron un estilo cultural propio. Mil años después, Japón fue el primero de los países asiáticos orientales en adaptarse a la civilización occidental.

Edad antigua o Kodai

En el 710 una nueva capital fue diseñada de nueva planta en Nara según los modelos de la capital china de Chang´an de la dinastía Tang. Durante los años que en esta ciudad se mantuvo la capitalidad, Japón recibió numerosas influencias culturales y tecnológicas del continente. Se compilaron las primeras crónicas históricas, el Kojiki (712) y el Nihon shoki (720); el budismo y el confucianismo fueron utilizados con fines políticos para favorecer a la autoridad en el poder y los templos se ramificaron extendiendo sus brazos por todo el país; se centralizó el gobierno y se inició el censado de la población y de la posesión de la tierra.

En el 794 se decidió un nuevo traslado de la capital, en esta ocasión se estableció donde se levanta hoy la moderna ciudad de Kyôto. Ésta iba a convertirse en el lugar de residencia permanente del emperador, y en la capital del país hasta el siglo XIX, cuando la capitalidad se trasladó a Edo, la actual Tokyo. El período que va desde el 794 al 1185 se denomina período Heian.

Éste supuso la total asimilación de la cultura china y el florecimiento de una elegante cultura cortesana. Políticamente la corte imperial se vio dominada por los nobles de la familia Fujiwara y encontró dificultades en la proliferación de fuertes dominios llamados shôen, y por tanto, en mantener su control sobre las provincias. Ante la inexistencia de una fuerza militar centralizada y efectiva, los clanes guerreros comenzaron a acumular poder, primero en las provincias y después en la corte. Así la familia de los Taira desplazó a los Fujiwara y ejerció su poder a mediados del siglo XII.

Etapa medieval o shûsei

Los Taira fueron barridos del poder en 1185, de nuevo por un clan guerrero, el encabezado por Minamoto no Yoritomo, quien recibió el título de shôgun, general en jefe de los ejércitos del emperador, y estableció un gobierno militar en Kamakura, una pequeña ciudad al este de Japón.

Las cuatro primeras centurias de dominación del guerrero cubren el período Kamakura (1185-1333) y el período Muromachi (1333-1568), y suelen ser descritas como la era feudal de Japón. El gobierno del shôgun asumió el control de la administración de justicia, la sucesión imperial, y la defensa del país contra los intentos de invasiones mongolas a finales del siglo XIII.

Primero fue encabezado por Yoritomo y sus hijos, pero con posterioridad, dada la edad de los sucesores, fueron los regentes de la familia de los Hôjô quienes ejercieron el control sobre la nación. En 1333 una coalición encabezada por el emperador Go-Daigo, que pretendía restaurar la perdida autoridad, desbancó del poder a los Minamoto. Fue la familia de los Ashikaga, que había apoyado al emperador, quien consiguió de nuevo hacerse con el poder del shogunato. Ashikaga Yoshimitsu fue capaz de dominar a los poderosos clanes provinciales, que le ofrecieron su apoyo.

Cuando su fuerza se debilitó, dichos clanes comenzaron a rivalizar entre ellos y con el shôgun, lo que dio lugar al inicio de las guerras Ônin (1467-1477). El país entró en un período de guerra endémica conocido como "período de los Estados en Guerra" (1467-1568), en el que los señores feudales, ignorando el poder del shôgun y del emperador, se enfrentaron unos con otros por la hegemonía local.


Sendoshi Kurumada

Comentarios

Lo más leído en el Templo