Los héroes se hacen, no se crean.

Cualquiera puede ser un héroe con súper poderes


Hoy estoy sumido en un sin fin de pensamientos sin sentido, es la extraña sensación de haberse perdido en medio del camino. No lo digo como un lamento ni mucho menos, la única forma que conozco de saber donde se encuentra uno es perdiéndose en el camino un par de veces para ubicarse. Con lo complicada que se ha vuelto la vida, e necesario estar seguro hacia donde se dirigen las metas y las expectativas.

En estos días he pasado unos buenos momentos jugando Dungens and Dragons (calabosos y dragones), este popular juego donde se selecciona a un personaje y se interpretan sus acciones a través del movimiento azaroso de los dados, así como se vive su vida y se puede divertir entre los amigos; en este fascinante juego me encuentro de frente con una idealización de lo que uno mismo es, se busca a los personajes que se acoplen a la personalidad del jugador, paso a paso con ciertos criterios este va destilando la personalidad del jugador en su máxima expresión; no solo refiriéndose a ser un sujeto “rescata princesas, mata dragones malvados y salva gatitos”, sino un comediante, el cantante del grupo que siempre habla con todos los personajes puesto que es el más sociable, el ladrón del cual hay que cuidarse por que le roba hasta los calzoncillos a uno si se da la oportunidad y así cada uno de los acompañantes. En realidad si uno lo piensa también es muy curioso que en los juegos en línea se aplica este mismo paradigma de que los jugadores quieren ser más participes de quienes son, o por lo menos de lo que aparentan ser.

Estas son válvulas de escape de una realidad que se presenta absoluta e inmutable, un mundo que simplemente le quieta a sus miembros la esperanza de ser un héroe. ¿Quién puede hoy en día llamarse a si mismo “Honorable”, “justo” y “honesto?, el mismo significado de estas palabras no es el mismo que en otras épocas. No intento excusar el mal del mundo ni mucho menos decir que ya no existe buenas personas en este planeta, por que he tenido la dicha de conocer a muchas, solo que esta era esta marcada por ser eminentemente humana, emocional, llena de errores, incapaz de superar lo que ha sido; sino más que una reproducción de los errores del pasado una y otra vez. El principio de la primera de cada de este siglo esta marcada por una de las guerras más injustas y sin sentido que se han podido poner en la historia.

En mi querida Costa Rica, antes de su primera década en el presente siglo, ya ha habido uno de los peores desencantos a la política y DOS fraudes electorales. Prácticamente se ha destruido el concepto de costarricense al punto de que los mejores y más grandes intelectuales se van de su patria por que son hombres y mujeres sin tierra, por que la de ellos la cambiaron por cuencas de vidrio. Parece que este siglo va a estar lleno de ajetreos y calamidades.

No quiero ser desesperanzador, también pueden pasar cosas buenas, ¿quien dice que no se encuentre la cura al cáncer y al SIDA el día de mañana?, solo que la visión realista me impide pensar que lo mejor simplemente pasará, sino todo lo contrario. Puede que el presente cambie, que se cree un nuevo concepto de lo que somos y las cosas mejoren, que se refresque el deseo de hacer y de vivir en un mundo digno para todos, no puedo dejar de recordar la frase que escuche en algún momento de mi vida: “los héroes nacen en la adversidad. ¿Quién puede ser valiente si solo cosas buenas le han pasado en la vida?”.


A veces quienes quieren hacer un mundo mejor pasan por locos.

También creo que gran parte de lo que se vive en el mundo en estos días es producto de una perdida profunda en la fe en “los otros”, en el hecho de poder dejar la casa abierta cuando se va a la tienda, el tener que cerrar la puesta con dos o tres cerrojos distintos más un portón de acero. El no conocer al vecino o dar por sentado que “otros” deben encargarse de los problemas de delincuencia, de la suciedad de las calles y demás problemas que se viven a diario.

La verdad es que todos somos responsables vivir de esta manera. Cada uno de nosotros crea su ambiente a como permite, si dejamos que haya unos vándalos en la esquina ahí se van a quedar, si permitimos que nuestras leyes permitan que se asalte a alguien y el delincuente este libre en menos de 24 horas es por que así las personas trabajadoras lo estamos permitiendo.

No hay que crear personajes ficticios que vengan a curar el mundo, hay que ser esos personajes, el ser héroe significa convertir en hecho todo lo pensado. Más que criticar el mundo desde el anonimato de algún foro o personaje en un video juego, seria mejor salir de la casa y tratar de hacer algo que mejore el lugar donde se vive…. y si, noto la ironía de este articulo.

Marco "A punto de cambiar el mundo" Barrios Piedra

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