Las sombras letales Japonesas....



Geovanni esta de regreso, después de perderme un tiempo del Blog. Mi ausencia se debe a tres cuestiones:

1.La Univesidad
2.Code Geass
3. Gundam 00



Y sabiendo lo enajenado que soy de los mechas, no he tenido tiempo. De esta manera; en un rato que tuve y leyendo un poco sobre mitología Japonesa y China; me pareció que sería bueno hablar interesante un poco de los Ninjas. ya que su contribución en la historia ha sido marcada, tanto Japón como en China.


NINJAS

En la historia de Japón, se llamaba ninja a aquellos que eran especialmente entrenados en una variedad de artes marciales poco ortodoxas. Los métodos usados por los ninjas incluían el asesinato, espionaje, y una gran variedad de artes marciales.

En la cultura japonesa usualmente eran entrenados para cumplir con peligrosas misiones. Todavía se desconocen sus orígenes. Entre sus tareas se contaban el sabotaje, el reclutamiento y los asesinatos como formas de desestabilizar y crear caos social en territorio enemigo o contra un jefe enemigo, quizás en servicio de sus señores feudales (daimyo, shogún), o en una guerrilla interna de la organización ninja.

Etimología

Ninja es la lectura on’yomi de dos kanjis usados para escribir shinobi-no-mono, que es la expresión japonesa usada para nombrar a las personas que practican el ninjutsu (a veces mal traducido como ninjitsu). El término shinobi puede rastrearse hasta llegar al siglo 8º, cuando Heguri Uji escribió un poema para Otomo no Yakamochi. La connotación subyacente de shinobi significa ‘escabullirse’ y –por extensión- ‘abstenerse’, por lo tanto está asociado con el sigilo y la invisibilidad. Mono significa ‘persona’.

La palabra ninja se popularizó en la cultura de posguerra de la 2º guerra mundial. El nin de ninjutsu es el mismo que el de ninja, mientras que jutsu significa arte o habilidad, por tanto ninjutsu significa ‘la habilidad de pasar desapercibido’ o ‘el arte del sigilo’; de ahí que ninja y shinobi-no-mono se puedan traducir como ‘el habilidoso en el arte del sigilo’. De forma semejante, el término ninjutsu-zukai significa ‘aquel que usa el arte de permanecer desapercibido’.

Otros términos que pueden ser usados incluyen a oniwaban (‘uno en el jardín’), suppa, rappa, mitsumono, kusa e Iga mono (‘uno de Iga’).

En inglés el plural de ninja puede permanecer invariable como ‘ninja’, lo cual refleja la falta de número gramatical del japonés, o el plural regular del inglés ‘ninjas’.

Los ninjas usaban tácticas sigilosas contra los enemigos mejor armados, como los samurai, pero eso no significa que estuvieran limitados al espionaje o al trabajo encubierto. Sus armas y estrategias derivaban en parte de la necesidad de defenderse a sí mismos de los samurai.

Los ninjas como grupo comenzaron a aparecer alrededor en el siglo XV de la era feudal japonesa como organizaciones marciales que predominaban en las regiones de Iga y Koga, en el centro de Japón.

En ese momento, los conflictos entre los clanes de los daimyo que controlaban pequeñas regiones de tierra, establecieron la guerrilla y el asesinato como alternativas viables contra el ataque frontal. Desde que el Bushido, el código samurai, prohibió dichas tácticas por ser deshonestas, un daimyo no podía esperar que sus propias tropas cumplieran con las tareas requeridas; por eso tenían que comprar la ayuda de los ninjas para realizar estos golpes de espionaje, asesinatos, e infiltración en las líneas enemigas.


Hubo algunas personas y grupos que se creía eran potenciales ninjas históricos de aproximadamente el mismo período. Se rumoreaba que algunos de los más altos daimyos y shogunes eran ninjas, y explotaban su rol como cazadores-ninja para infligir sospechas y oscurecer su participación en los ‘deshonestos’ métodos ninja.

Aunque fueron clasificados como asesinos, muchos de los ninjas eran guerreros en todo sentido. En el libro de Stephen K. Hayes, Mystic arts of the ninja, Hattori Hanzo, uno de los ninja más conocidos, es descrito en una armadura semejante a la de un samurai. Hayes también dice que aquellos que terminaron escribiendo la historia de los ninjas eran personas en posiciones de poder dentro de las dictaduras militares, y que los estudiantes de historia deberían saber que la historia de los ninja fue guardada por observadores que escribieron sobre sus actividades viéndolas desde afuera.

El ninjutsu no apareció como un arte bien definido en primer lugar, y pasaron muchas centurias hasta que los ninjutsu fueron establecidos como un sistema de conocimiento independiente con su propio derecho. El ninjutsu se desarrolló como una contra-cultura altamente ilegal en relación de la elite samurai, y por esta razón los orígenes de su arte fueron envueltos durante siglos en misterio, secreto, y confusión histórica deliberada’.

Hayes realiza una afirmación similar: ‘Los predecesores de los ninja japoneses fueron llamados rebeldes en relación a los budistas que escaparon hacia las montañas cerca de Kyoto a comienzos del siglo VII A. de C. para escapar de la persecución religiosa y la muerte a mano de las fuerzas imperiales’.

En su historia, los grupos ninja eran pequeños y se estructuraban alrededor de familias y pueblos, más tarde desarrollaron una jerarquía marcial que se acercaba a la de los samurai y los daimyo. Estos grupos ninjutsu se establecieron en estos pueblos para protegerse contra los ladrones y los invasores.

‘Los museos ninja’ de Japón afirman que las mujeres también fueron ninjas. Una ninja femenina era llamada kunoichi; los caracteres pueden derivar de los cambios que convirtieron a las kanji en mujeres. A veces se las describía como espías que descubrían los secretos de un enemigo mediante la seducción; aunque también es posible que fueran empleadas como sirvientas, lo cual las ponía en una posición cómoda para escuchar información valiosa.

Como organización marcial los ninja tenían muchas reglas, dentro de las cuales la más importante era mantener en secreto al clan ninja y a los daimyo que les daban órdenes.

Vestimenta histórica, técnicas e imagen

No existe evidencia de que la vestimenta ninja fuera siempre un traje negro. En tiempos modernos, el camuflaje basado en colores oscuros como rojo o azul se usaron para ocultarse mejor a la noche. Algunos eran reversibles: oscuros en la parte externa, y blancos en la parte interna para ocultarse mejor en la nieve. Algunos ninja usaron la misma armadura o vestimenta que los samurai o los campesinos japoneses.

El estereotipo de ninja que continuamente viste de negro (shinobi shozoku) viene del teatro Kabuki. Los tramoyistas se vestían de negro y movían la utilería sobre el escenario. La audiencia obviamente los veía, pero hacían de cuenta que eran invisibles. Basado en esa creencia voluntaria, los personajes ninja también pasaron a mostrarse en el teatro vestidos de negro. Esto implicaba que la audiencia los tomara como invisibles, o también hacía a los ninjas indistinguibles de las personas de utilería, hasta que el ninja se destacaba de entre ellos por el ataque o el asesinato.

Las botas de los ninja, al igual que el resto del calzado japonés de ese momento, tienen un dedo separado que facilita la escalada de paredes y mejora la capacidad de agarre. Son lo suficientemente suaves y silenciosas para pasar desapercibidas. Los ninja también pegan púas especiales en sus botas llamadas ashiko.

La cubierta para la cabeza sugerida por Soke Masaaki Hatsumi (en su libro The way of the ninja: secret techniques) utiliza lo que se llama comúnmente sanjatu-tenugui. Esta vestimenta se logra atando tres medias alrededor de la cabeza de manera que la máscara sea segura pero a la vez flexible. Algunos usan una bata larga, generalmente azul oscura.
El asesinato, el espionaje, y la infiltración, son tareas que llevan al desarrollo de tecnología especializada en armas y herramientas de infiltración.


Los Grandes Centros liderados por Stephen K. Hayes, quien estudió con Masaaki Hatsumi y es la primera persona que llevó el ninjutsu a América, Georgia, a mediados de los ’70. Hayes luego se reubicó en Dayton, Ohio, alrededor de los ’80, donde continuó enseñando el arte por varios años. Ahora enseña un sistema occidentalizado, el To- Shin Do.

La Escuela Kurokawa-ryu fundada por Yoshiro Kurokawa, llevada a Brasil por Minoru Tanaka, actualmente Ebio Cleser Borges es el líder de la organización en Brasil. Fuma Ryu afirma remontarse al período Sengoku, además de que sus enseñanzas son mucho más tradicionales. Harunaka Hocino es la cabeza de la organización en San Francisco.

Hocino se mudó a los EEUU desde Japón a principios de los ’70. Su mejor discípulo es Steve Barlaan, 4º grado en Ninjutsu Fu-Ma Ryu. Barlaam fue el primer europeo en conseguir el estatus Master en este arte en 1992. Los artículos escritos por Hocino aparecieron mensualmente en el Ninja Magazine durante muchos años. También apareció junto a Steve Barlaam en varios números del Samurai Magazine, una de las revistas más importantes en Europa sobre las artes marciales. La escuela de Tenshin Shoden Katori Shinto ryu afirma haber sido la primera en incorporar el ninjutsu a su currículum.

El grupo Banke Shinobinoden. Jinichi Kawakami y su mejor estudiante Yasushi Kiyomoto afirmaron ser los últimos practicantes del Ninjutsu. Jinichi Kawakami afirmó ser discípulo de Mazado Ishida, que decía era uno de los últimos practicantes de Ninjutsu todavía vivos. Pero no hay información acerca de la existencia de Mazado Ishida fuera de la historia de Kawakami. Yasushi Kiyomoto y su maestro Kawakami pasaron por el entrenamiento brutal que soportaron sus antepasados. Su entrenamiento consistía en brutales castigos físicos además de condicionamientos mentales y espirituales extremos.

La Organización Jinenkan está encabezada por Fumio Manaka. En 1996 logró el Menkyo Kaiden en Bukinjan y fundó Jinenkan. El arte se centra sobre todo en las bases y el trabajo para moverse naturalmente, logrando la armonía de uno mismo con la corriente natural de los elementos.

La Organización AKBAN usa el currículo Bukinjan del mismo modo en que fue usado cuando Doron Navon, el primer extranjero en ser shihan Bujinkan, estudió con Hatsumi. Israel fue uno de los primeros lugares donde el ninjutsu Bukinjan se practicó fuera de Japón, con Doron Navon como líder desde 1974. Doron Navon no practica más el Bujinkan ninjutsu.

La Escuela Kurokawa-ryu fundada por Yoshiro Kurokawa, llevada a Brasil por Minoru Tanaka, actualmente Ebio Cleser Borges es el líder de la organización en Brasil.


Hay muchas organizaciones y personas que enseñan artes marciales que identifican con el ninjutsu pero carecen de un linaje claro para los maestros japoneses. Aunque estas artes marciales son efectivas, no poseen ninguna evidencia que compruebe su origen japonés
.

Ashida Kim es un artista marcial que realizó afirmaciones no verificadas sobre el entrenamiento cruzado en el ninjutsu, así como reclamos insubstanciales de ser el último gran maestro.



Frank Dux es un artista marcial cuyos orígenes no son certeros. Haha Dung ha escrito más de una docena de libros sobre control mental y ninjutsu pero su autoridad sobre el tema no es verdadera.

Joanne K. Martins es quizás la única artista marcial mujer en haber llegado al título Kunoichi luego de alcanzar el puesto más alto en el Dojo Bujinkan Ninjutsu en Kyoto, a la edad de veinticinco. Aunque esta información todavía no fue verificada, se publicó en el artículo ‘Artistas Marciales americanos notables’ de Tom Callos en la revista Black Belt (número de Mayo 2007) Robert Law es un artista marcial canadiense que afirma ser el 119º maestro del Geijin Ryu y el 29º maestro del Yoshin Mijo Ryu, así como el líder de más de 20 subgrupos de clanes.

Ronald Duncan es un artista marcial americano que maneja el Sistema Way of the winds Martial Arts y afirma ser el padre del ninjutsu americano. SWAN Shadow Warriors Association of Ninjitsu es una organización mundial que enseña el ninjitsu moderno. La instalación donde se lleva a cabo el entrenamiento SWAN es el EEUU.

Neo ninja es un término que se refiere a las escuelas de artes marciales modernas que afirman enseñar elementos de los ninjas históricos de Japón, o basar la filosofía de sus escuelas en los rasgos atribuidos a los ninjas japoneses.

Historia

Kunoichi es la contraparte femenina de los ninja masculinos. Durante el tiempo de las guerras Tong, hubo una proliferación de sociedades secretas y ‘cazarecompensas’ que buscaban a los ninja japoneses. Algunos de los clanes tradicionales se separaron, dejando a los ronin, que eran samurais inexpertos, muchos de los cuales habían empezado con ‘Las cinco familias del Camino Silencioso’.

Los ronin, viudas y huérfanos de los cazadores, se introdujeron en el mundo de los yakuza (mafiosos y apostadores) o se volvieron nómades. Sobrevivieron muchas más mujeres que hombres y comenzaron a buscar un líder y una causa. Las mujeres sobrevivientes ocasionalmente ganaban la oportunidad de casarse con el jefe de la casa.

La hija de uno de los lores asesinados, poco después de su boda con un nuevo esposo, invitó a todos los amigos y parientes de su marido a una fiesta y los envenenó. Esto le dio una reputación de eficiencia despiadada, y le dejo muchos amigos fieles a su familia además de una operación a toda escala de drogas. Su verdadero nombre se perdió con el tiempo, pero fue conocida como la ‘Dama Dragón’ (Kunoichi).

Derivación de la palabra Kunoichi

El término se cree que deriva de nombres de los caracteres que poseen los tres rasgos del carácter de una mujer kanji; dichos en el orden que son escritos: ku-no-ichi. Las antiguas citas literarias incluyen al Enshu Senkuzuke Narabi Nihyaku In (1680) así como el Maekuzukeshu (1716), que asocia específicamente la palabra con el kanji que sostiene la etimología. Esto puede ser una etimología moderna falsa hecha por Futuro Yamada. Mientras que haragana y kanji pueden existir en la misma palabra, katakana generalmente no aparece en conjunto con otras.

Las maneras Kunoichi

A diferencia de la ficción, las verdaderas kunoichi fueron entrenadas de forma muy distinta a la de los ninja masculinos. Su entrenamiento se centraba más en los disfraces, venenos, y el uso de su sexo como ventaja. Aunque eran entrenadas en el combate, sólo lo usaban si las atrapaban. A menudo se disfrazaban como geishas, prostitutas, adivinadoras, y siempre buscaban acercarse lo más que pudieran a sus enemigos. Generalmente, seducían a sus víctimas y cuando se acercaban lo suficiente, los envenenaban.

Las kunoichi escondían los venenos en sus disfraces, como agujas envenenadas en sus cabellos o puñales en sus mangas. También convertían un objeto inofensivo en algo peligroso. Por ejemplo, aprendían a quebrar huesos con sus zapatos de madera o a usar su paraguas como escudo.

Guerra del asedio: Ésta es por lejos la habilidad más citada de los ninja. Se trata de la capacidad de entrar en un edificio por medio del sigilo y la cautela, y de poner en marcha un ataque sorpresa contra los habitantes, causando confusión dentro mientras que el ejército asalta al castillo desde afuera. El grupo del ninja escalaba las paredes de un castillo bajo el velo de la noche, después comenzaban a encender todo para crear un incendio. No usaban negro, sino todo lo contrario, el traje de los defensores del castillo, haciendo difícil distinguir al amigo del enemigo, y que de esa manera pareciera que había una rebelión dentro de las filas. Una vez que el caos reinaba dentro del castillo, el ejército atacaba. Los ninjas también podían llevar a cabo valiosos servicios si eran parte de la fuerza atacada en el castillo. El ninja podía escapar furtivamente fuera del castillo en la noche, y robar la bandera del ejército enemigo, para colgarla en los almenajes por la mañana y desmoralizar a los atacantes. Una fuente cuenta que había ninjas que salían casi todas las noches del castillo para asustar y acosar al ejército que atacaban, sin hacer ningún daño físico. Sin embargo, las tropas tenían que estar siempre en guardia, y al no poder dormir bien, los soldados eran ineficaces cuando llegaban los ataques.

Exploradores: Los Ninjas fueron empleados a menudo para probar la fuerza relativa del enemigo. En primera instancia, un ninja podía permanecer en la hierba alta fuera de un campamento enemigo y quedarse allí hasta el amanecer antes de volver para dar el informe. En la mayoría de los casos, sin embargo, el explorador iba simplemente a caballo, y era indistinguible de los exploradores usados en la guerra en cualquier lugar del mundo.

Asesinos: Esto es por lo que se conoce al Ninja hoy. Incluso en el siglo XVII, el Daimyo temía las tentativas de asesinato de los ninjas. Todos los generales importantes sufrieron intentos de asesinato en algún momento de sus vidas Por supuesto, no todas estas tentativas eran de los ninjas, y el asesinato mejor conocido, el de Oda Nobunaga, fue realizado por uno de sus generales. De hecho, en ninguna parte se encontró ni un solo asesinato realizado por un ninja que estuviera bien documentado.

Fueron temidos en Japón para la posibilidad, pero parece que la posibilidad nunca se convirtió en realidad. Los ninjas intentaron matar gente, pero no tuvieron mucho éxito. Una táctica consistía en acostarse en un campo de batalla, y cuando la víctima se acercara, mirando todos los cadáveres, el ninja saltaba repentinamente y atacaba. Nobunaga fue sorprendido por dos disparos en una ocasión, pero las balas fueron detenidas por su armadura. Posteriormente, aprendiendo de la tentativa anterior, Nobunaga fue sorprendido por tres ninjas que intentaron matarlo con una explosión. Fallaron, pero mataron a siete de sus enemigos.

La mayoría de los ninjas asesinos eran contratados por el daimyo rival para matar a sus enemigos, pero no tenían mucho éxito. Es este elemento de la habilidad del ninja el que ha sido acentuado en nuestra comprensión moderna de los guerreros del ninja. En muchos, aunque no en todos estos relatos, los ninjas tuvieron su origen en la provincia de Iga o en Koga, hoy la provincia moderna de Mie.


Esta se considera la patria ancestral de las artes del ninja, y parece haber sido el área principal de la actividad del ninja. Oda Nobunaga decidió que eran demasiado peligrosos y se dirigió hacia Iga en una expedición punitiva en 1581. La leyenda cuenta que los ninja sobrevivientes se dispersaron por todo Japón después de su derrota. Dondequiera que fueran, su utilidad estaba pronto en un extremo. Pero así como el Oda Nobunaga consideró al ninja solo como una amenaza, Tokugawa Ieyasu los vio como una oportunidad, y pronto él hizo que un grupo de ninjas de Koga trabajara para él. Participaron en la batalla de Sekigahara, aunque sin sobresalir particularmente.

Trabajaron para Tokugawa otra vez en 1614-15, durante las campañas contra el heredero pasado de Toyotomi, y una última vez en 1638 contra el daimyo cristiano de Kyushu en la rebelión de Shimabara, en ambos casos operando su papel tradicional como amos de la guerra del asedio.

Después de la rebelión de Shimabara, finalmente llegó a la paz. Y así siguió durante cientos de años.


Durante la época relativamente pacífica del período Edo, bajo el mandato del Shogunato de Tokugawa, los artes florecieron. Las historias, impresiones en maderas, y obras narraban historias dramáticas del pasado. En estos cuentos, los ninja se convirtieron en seres semi-míticos, cuya capacidad de ocultar, de permanecer silenciosos, de sitiar castillos, y de matar, llegó a alturas sobrehumanas, por tanto la única explicación para sus energías fue la brujería.

En uno de estos relatos, un ninja era capaz de convertirse en una rata. Las historias cuentan acerca de otro ninja que sabía sobre la “magia del sapo,” e iba montado encima de un sapo gigante. En otro cuento, un ninja encuentra a un hechicero en el camino, y cuando el ninja corta al hechicero, sus intestinos continúan atacando el ninja, y por eso el ninja le pide que le enseñe los artes mágicas. Frente a energías tales como estas, la capacidad de volar o la invisibilidad parecen corrientes.

La mística que rodea el ninja se relaciona con la larga asociación con los monjes, especialmente con los yamabushi, que creían que si realizaban largos los peregrinajes a la montaña y a eso le sumaban la adoración y el ayuno, entonces se les revelaría su religión, y al mismo tiempo se les concedería energías sobrehumanas. Las provincias de Iga y de Koga, al ser muy montañosas, eran destinaciones regulares para los yamabushi. Además existen rumores acerca de ninjas que se disfrazaban a menudo como monjes vagabundos para pasar desapercibidos en sus misiones.

Así como la leyenda del ninja creció, también lo hicieron la cantidad de figuras históricas que fueron definidas como ninjas. Cualquier samurai que hubiera vagabundeado por las montañas durante un período inexplicable era un candidato posible: el guerrero Yagyu Jubei, que sirvió a Tokugawa pero por otra parte se tomó una licencia de diez años inexplicable, es un ejemplo típico. Los centenares de cuentos que se han escrito sobre esos años desconocidos y los acontecimientos que lo rodeaban, dan por sentado que Jubei, y de hecho el clan entero de Yagyu, eran ninjas. Y podía ser verdad. Mucho menos probable era la afirmación de que Minamoto Yoshitsune, hermano del shogún Yoritomo del siglo XII, era un ninja.

Yoshitsune fue forzado a huir de su hermano, que intentaba consolidar su poder y cerciorarse de que allí no habría ningún otro demandante para el título de shogún. Yoshitsune tuvo que disfrazarse como yamabushi para escaparse. Pero a pesar de este ‘disfraz ninja’, pasarían varios siglos antes de que los ninjas aparecieran en el expediente histórico. Pero eso no fue así para a los creyentes del ninja, que incluso llegaron a decir que él fundó la escuela de las artes ninja, el Yoshitsune-Ryu.

Además de las capacidades de los ninjas en las artes y la magia, existe otra habilidad que merece ser mencionada. Desde fines del siglo XVIII, el arte erótico salía impreso en numeritos del ninja. Generalmente, las imágenes mostraban saqueos y violaciones violentas. El ninja, con el uso de su fuerza y su capacidad de ganar la entrada a cualquier lugar, mataba a hombres y violaba a las mujeres. La literatura y el cine japoneses sobre los Ninja contienen un elemento de gran erotismo.

Con todas estas historias escritas sobre los ninjas, era solo una cuestión de tiempo antes de que aparecieran en la etapa del teatro Kabuki. Y entonces, los actores tenían un dilema: ¿cómo se retrata un ninja? ¿Y más importante, qué tipo de traje debían utilizar? A veces, usaban un atuendo parecido al de cualquier otro samurai. Pero la reputación de los ninjas como amos de la cautela y de la invisibilidad, sugirieron un traje a los actores. Ya en ese momento había gente en el escenario, en muchos edificios (especialmente del teatro de Bunraku o de la marioneta), que fueron creados para ser ‘invisibles’. Eran el kurogo, o los tramoyistas. Los tramoyistas, para indicar a la audiencia que los no debían ser vistos, usaban negro de arriba a abajo. Y aquí tenemos el uniforme famoso del ninja.

Tiene poco sentido usar esta vestimenta en el mundo real, pero en las convenciones del teatro de Kabuki, era el traje perfecto. Y hasta el día de hoy, cada película sobre ninjas, sin importar cuan auténtica intente ser, incluye el traje del tramoyista de Kabuki como pieza indiscutible y vital de las prendas de vestir exteriores del ninja.

Y así, durante el período Edo, el ninja se trasladó desde el campo de batalla hacia el de la imaginación, y ha permanecido allí desde entonces. Mientras que las obras populares fueron presentadas a las audiencias para mostrar las hazañas del ninja, los que creyeron realmente en ellos continuaron su tradición y practicaron sus técnicas en varias escuelas a lo largo del país. Muchos de ellos guardaron libros secretos que mostraban su armamento, sus medicinas y recetas.

Mientras la paz siguió su curso, la necesidad de guardar el secreto de estos libros decreció cada vez más, y eventualmente muchos de ellos fueron publicados. Son estas las guías que se han utilizado desde entonces como referencia para las distintas armas y equipamiento usados por el ninja.

Mucha de la mística del ninja reside en su arsenal de armas. Los libros publicados desde 1676 ilustran muchas de las armas y técnicas del ninja que fueron utilizadas. Las armas principales del ninja eran las mismas armas empleadas por el samurai: la espada, la pequeña espada, el arco y flecha. Otras armas, sin embargo, parecen haber sido únicas y exclusivas del arte ninja.

Armas con garras: Hay dos clases principales: las garras de neko-te o “del gato,” y las garras del shuko o “del tigre”). El neko-te consiste en pedazos de metal filosos que se extienden por el extremo de cada dedo, como las garras de un gato. Esto es supuestamente un arma defensiva, usada principalmente por ninjas mujeres. El shuko, por otra parte, tiene muchos usos. Además del uso en el combate, pueden también ser utilizados para subir paredes y árboles.



Armas con hoces: La hoz manual corta, o el kama era un arma que podía tener un buen uso para los ninja. Como la posesión de un arma estaba prohibida para todos menos para los samurais, un ninja con un cinturón lleno de espadas y shuriken podía llamar la atención. Pero el kama era una herramienta agrícola común, y un ninja que llevara tal arma no llamaría la atención. Puede también ser atado a una cadena y convertirse en un arma mucho más complicada y peligrosa, con mayores usos.

Shuriken: El famoso shuriken, o “lanzador de estrellas.” Existían diversos estilos de esta arma.

Armas de invisibilidad: La capacidad de desaparecer o de llegar a ser invisible es uno de los rasgos legendarios del ninja. Para mejorar esta capacidad se debía desarrollar las técnicas de metsubushi. Se creaba un brebaje, cuya receta pasaría de clan a clan, de ninja a ninja, y que generalmente incluía una variedad de irritantes para el ojo, y se colocaba en una cáscara de huevo o en la cáscara de una nuez para su uso rápido. Combinado con pequeños explosivos, eran suficientes para permitir que un ninja se escapara cómodamente.

Mudras: Parte del lado místico de las artes ninja es la invención de varias señales manuales llamadas “Mudras.” Las Mudras ahora son un componente básico del entrenamiento de los ninja espirituales, y aparecen en muchas películas. En leyendas y mitos acerca de los ninja, estas señales se realizaban generalmente para hacer magia. Sin embargo, estas señales tienen muy poca conexión con los ninja. Probablemente se volvieron parte de la mitología ninja a partir de su asociación con los yamabushi, los monjes peregrinos de las montañas.


"NO ES LA OSCURIDAD UNA AMIGA, UN TESORO, UN REGALO, PARA PODER SER ELLA Y CON ELLO ACABAR CON CUALQUIERA...NO ES LA MUERTE ALGO HERMOSO...OTRA ARMA...DE DOS FILOS"

"Tomo del Ninjutsu vol. 1"


Geovanni "Los mensajeros de la muerte se llaman Ninjas" Notto...

Comentarios

Anónimo dijo…
La Unica Sombra Letal De Japon, Es El Zorro Demoniaco Venerado Por Muchos.
Kiba dijo…
mae geo buen artículo, me limpió!
Naruto debe estarse revolcando en su tumba!
Anónimo dijo…
Pura Vida Kiba-San....y 007 EL Zorro demoniaco??? XD

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