Blasfemias en plena tarde

Ha pasado ya tiempo desde el último reportaje que les deje por este lugar de mala muerte que llamamos Templo Kaori. No me quejo, solo es que aquí en especial, es donde entre los comentarios uno solo encuentra “diarrea intelectual”; así que de una vez les digo que no planeo leer lo que vayan a escribir ahí con respecto a este artículo.

Feliz día de la blasfemia

Ella no es buena, pero eso es bueno

Advertencia: Este articulo contiene lenguaje intelectual, soez y desarrollado, no apto para audiencias susceptibles... 

Hoy dedicare mis palabras a la sátira y burla de las entidades religiosas ó las entidades que se ofrecen a sí mismas como verdades absolutas. Primero y muy importante, hay que separar al resentido religioso con el simpático blasfemo que encuentra en su vida diaria un momento para recordar a su supuesto creador con un lenguaje alegórico y cómico sobre su destino o nacimiento.

La palabra blasfemia se define como: la injuria contra dios, la virgen o la religión/ la injuria grave en contra de otra persona. Calma que no voy a usar muchas definiciones, se bien que hay varios que se asustan cuando les hablan de textos enormes que no comprenden.

Es malvada, malévola y hermosa 

Esta pequeña maraña de palabras que se desatan en cada momento de ira temible, en el ocio absoluta o en la más plena de las consciencias; son la más absoluta expresión cultural. Los que las dicen las determinan para momentos específicos del día, para expresar su más profundo tedio y su deseo profundo de odio a su suerte.

Que esa cara inocente nos los engañe, ella blasfema
“Decir esas cosas van en contra de la ley de dios”; pero al blasfemo no le importa la ley de dios en el momento de su expresión, por eso es honesta, firme e iracunda. La identifica fácilmente, sabe  por ver a otros en que momento usar esa expresión especifica. Dicen las lenguas de las generaciones anteriores que el diablo se alimenta de la expresión llena de blasfemias, pues se ha dado un banquete como pocos con las últimas generaciones.

Se puede blasfemar contra otros, lo que hace que a más de uno dentro de la comunidad ñoña de Costa Rica se sienta doblemente insultado cuando levantan una injuria contra este. Por un lado la injuria grave como ser humano y luego como ser autoveatificado todo poderoso. La verdad es que la blasfemia contra el otro es común dentro del lenguaje costarricense y solo hay que ver las palabras más comunes como: mae, vara, playo, hijo de puta, etc.

Nadie puede ser tan sensual y ser bueno

No se puede pensar en este tipo de blasfemia como solo una expresión de ira incontenible. Es una muestra de la cultura que se lleva dentro del concepto imaginario del “ser costarricense”. Su uso dentro como expresión es notable y desmitifica el tabú sobre que ciertas cosas no deben ser dichas. Todo lo que pueda decirse debe decirse.

El lenguaje es rico en uso porque se usa, se mantiene por contenido y se limita por los conceptos que como conocimiento y compresión-comprehensivo se adopte. Estamos limitados a lo que conocemos y de lo que no se puede saber no podemos hablar. La blasfemia es eso que se sabe, pero por algún momento se calla.

Ahora 5 de las peores blasfemias que he escuchado o dicho:

     Dios no es un buen anticonceptivo

    Tan puta María que le cuadraba al zoofilia

    A José ni se tomó el caldo, ni le dejaron lo huevos

    Me cago en todas las putas vírgenes cristianas

    (Mi favorita) Me cago en las tetas de la virgen para que el cristo mame mierda

                    Un clásico, ángeles del infierno - Maldito sea tu nombre -


                    Otro clásico, Barón Rojo - Hijos de Caín-



                    Ella hace cosas malas, pero muy bien

                    Hideki-blasfemando por aburrimiento-Sama

                    Comentarios

                    Anónimo dijo…
                    Pues que falto de criterio. Tan superior que no leo las criticas, si gran aporte.

                    Diarrea mental el articulo..
                    Sin Nombre dijo…
                    El ORGULLO antes del caída. Comparto Diarrea mental el articulo.
                    Anónimo dijo…
                    Para que una persona escribe, si no le gusta recibir retro alimentación?. Entonces cual es el objetivo de presentar una idea en medio publico, si no deseo que sea debatida.

                    Creo que se da un sentimiento de egocentrismo, pero sera mas un sentimiento de yo tengo la razón?

                    Son disyuntivas, que aunque no vaya a contestar muy probable va a leer, por que si personas escribe dicho articulo es para crear algún tipo de polémica y es un hecho que vera los comentarios, esperando esa polémica. Nada nuevo.

                    Similar a lo que hacen periódicos como la Extra, pues bien este articulo es similar a esos "pseudo" artículos.

                    Al menos se que va a leer el articulo (no lo va a contestar por un tema meramente de orgullo), pero algo le molestara lo dicho acá y muy probable lo pongo a reflexionar.

                    Lo interesante y es de alabar al final como lograr reflexionar a través de algo como una blasfemia.

                    Lastima el orgullo o miedo del autor a no recibir critica.

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